El equipo de San José
debe recuperar la mística
 |
| San José 2011 |
-
Nunca
estuvo en observación el trabajo que cumplen los miembros del cuerpo
técnico de San José, cuyo entrenador Marcos Rodolfo Ferrufino, apenas
está en funciones un mes y algo más, tiempo en el cual demostró que el
equipo ya empieza a tener un patrón de juego, pero le falta algo muy
importante, la mística, se debe recuperar la mística.
Existen
muchas especulaciones de mal gusto de gente que busca poner en tela de
juicio el trabajo del técnico que poco a poco está armando y
determinando el sistema de juego que deben aplicar los jugadores que
conforman el equipo de futbol del crédito orureño.
Lo
cierto es que, la derrota sufrida por San José ante Aurora por 2-0 el
pasado miércoles, provocó una infinidad de comentarios, especulaciones y
hasta se atrevieron a “pronosticar” que el cuadro de la V azul
descenderá “porque está maldecido”, pero no dicen por quién, o por
quienes.
Estas
actitudes ridículas, desde ya, merecen ser rechazadas porque solamente
hieren el sentimiento de los orureños que quieren a su único
representante en el futbol profesional boliviano, Esas actitudes también
son una forma de seguir echando leña al fuego para mantener una presión
incomprensible de la hinchada hacia el plantel de futbolistas, porque
ellos son los que juegan, con la dirección técnica del entrenador
Ferrufino.
Si
el equipo está en situación difícil, es porque la presión es tremenda.
Mucha gente cree que de la noche a la mañana se puede armar un equipo y
definir un patrón de juego y eso no es así. Marcos Ferrufino recién
empezó un proceso que efectivamente está costando mucho conseguir sus
frutos, que en este caso son los triunfos.
En
el actual equipo existen jugadores de primer nivel. El directorio
presidido por Walter Mamani hizo una fuerte inversión para “llenar el
equipo” con jugadores considerados estrellas, pero inicialmente no
funcionó el cuerpo técnico y no pudo definir el patrón de juego. En esa
oportunidad el entrenador Víctor Hugo Andrada y el comité técnico, Waldo
Quinteros, definieron las contrataciones de futbolistas, entre malos
(lesionados) y buenos.
Llego
el argentino Marcelo Zuleta, que desconocía el futbol boliviano y
termino con el fracaso en el primer torneo. Luego planteo a la
dirigencia la salida de siete jugadores y la contratación de otros para
jugar en la Copa Sudamericana, donde también fracaso, hasta que al final
los hinchas pidieron la salida del argentino quién dejo el club.
La
esperanza estaba y está, en el entrenador orureño, Marcos Ferrufino,
quién inexplicablemente fue marginado el pasado año del equipo por el ex
- presidente Florencio España, cuando restaban tres fechas para el
final del torneo y había grandes opciones de lograr una plaza más para
un torneo internacional, pero, este tema es para otro comentario en otra oportunidad.
Viendo
el anterior trabajo de Ferrufino, la afición pidió el retorno de éste y
su cuerpo técnico. Por lo visto, armar el equipo le resulta difícil,
porque al parecer cuenta con jugadores heridos sentimentalmente, por eso
hay inseguridad en su acciones en un partido de fútbol.
Sin
embargo el funcionamiento del once santo mejoró mucho, pero aún existen
limitaciones para encontrar la fórmula que permita concretar los goles.
Ahí está el gran problema y en eso están trabajando en el cuerpo
técnico, lógicamente junto con el cuerpo médico que debe recuperar a los
jugadores lesionados.
Al
empezar este comentario, hicimos referencia a la mística. El equipo de
San José, debe recuperar la mística. La palabra mística se define como
el estado más elevado de la espiritualidad. También como el estado de
unión entre el alma y Dios a través del amor y en este caso, entendemos
que la mística deportiva se identifica con el espíritu ganador de un
equipo, de sentirse imbatible por lo menos jugando como dueño de casa.
Para
que San José recupere la mística, todos deben colaborar, apoyar, si
realmente son hinchas y quieren a su club. Debemos ser positivos.
-
