La hora de volver a una
sola cabeza en el fútbol
+ Los cirujanos del fútbol tienen en sus manos a este monstruo que sus antecesores dejaron en el quirófano y ellos alimentaron con sus pasiones.
La Paz, 14 agosto/Unidad de Comunicación del Ministerio de Deportes
Horas de cambio en el fútbol y en carrera contra el reloj, luego de la
renuncia del técnico Mauricio Soria, el empecinamiento del dirigente Carlos
Chávez y los compromisos a la vuelta de la esquina antes del primer partido por
las eliminatorias. El fútbol boliviano tiene la oportunidad de hacer una
cirugía profunda o salir del apuro con un simple cataplasma.
Ante la situación presentada, este sábado se reúnen los dirigentes del
fútbol nacional y creen que es hora de eliminar la paridad catastrófica de
asociaciones y Liga, porque deberían desaparecer unos y otros para dar paso a
una sola cabeza, tal cual determina el Anteproyecto de la Ley del Deporte que
en el artículo 34 señala: "El Sistema Deportivo
Plurinacional reconoce una sola Federación Deportiva por disciplina", para refrendar en el artículo 55: "Las Federaciones Deportivas organizarán las competiciones deportivas profesionales, para lo cual promoverán la creación de ligas deportivas profesionales de carácter nacional,conformadas por clubes deportivos profesionales. II. Las respectivas federaciones deportivas asumirán a su cargo la dirección y supervisión de lasligas deportivas profesionales que organicen".
Plurinacional reconoce una sola Federación Deportiva por disciplina", para refrendar en el artículo 55: "Las Federaciones Deportivas organizarán las competiciones deportivas profesionales, para lo cual promoverán la creación de ligas deportivas profesionales de carácter nacional,conformadas por clubes deportivos profesionales. II. Las respectivas federaciones deportivas asumirán a su cargo la dirección y supervisión de lasligas deportivas profesionales que organicen".
Los dirigentes de hoy, ignoran, muchos de ellos, porque en 1977 los
clubes grandes dejaron las asociaciones para conformar la Liga del Fútbol
Profesional boliviano, porque estaba enfermo, pero lo dejaron en el quirófano a
media operación, de manera que el enfermo quedó con dos cabezas (Liga y
Asociaciones), una estuctura inviable, apetitos personales a flor de piel y una
actitud de cambiar sin fijar el norte claro.
Entonces el fútbol boliviano venía de dos derrotas de la Selección en
Cali, por goleada, los clubes grandes habían sacado enorme ventaja frente a los
chicos y el torneo en las ciudades grandes había perdido atractivo, las
recaudaciones eran pobres y los clubes chicos aprovechándose de su mayoría en
los consejos les hacían beber vinagre a los grandes, aparte de compartir
recaudaciones.
Luego de la fractura, los clubes grandes no mejoraron lo suficiente y
fruto de ello es el actual torneo que se tiene, los clubes chicos languidecen
jugando tres meses al año, sin promoción de jugadores, huérfanos de público y
solo sacaron provecho los dirigentes para viajar, votar por el que más ofrece y
abandonar sus barcas y su misión.
“Son varios aspectos los que tenemos que analizar y cambiar, las mesas
de trabajo deben llegar a conclusiones consensuadas de modo que en el congreso
se aprueben. Hay que hablar de toda la estructura, de la forma cómo se
conformará el Comité Ejecutivo, los campeonatos, el fomento a las divisiones
menores y la cuestión legal para citar algunos. La actual norma tiene muchos
vacíos, por tanto muchas maneras de interpretar y eso hay que resolver”, opinó
Marco Ortega, presidente de la Liga y primer vicepresidente de la FBF al
matutino La Razón.
Los dirigentes decidieron volver al quirófano, ver al enfermo que lo
abandonaron en 1977, amputar las dos cabezas y formar una sola, pero en la
operación les puede salir un Frankentein, si es que prevalecen sus intereses
personales o un nuevo ser con posibilidades de desarrollar, si es que piensan
en el fútbol, entienden que no se puede hacer más papelones y dar un paso al
costado para que personas con vocación de servicio lleguen a este deporte.
Los cirujanos del fútbol tienen en sus manos a este monstruo que sus
antecesores dejaron en el quirófano y ellos alimentaron con sus pasiones.